Algo sobre mi

Hace unos años, estuve mirando un documental sobre la recuperación de drogadictos norteamericanos dentro una reserva indígena. El Indio los entrenaba a leer la Naturaleza en el desierto durante unas tres semanas. La ultima semana, les dejaba en un punto, con una meta en menta y un poco de agua. La mayoría que conseguía la meta, dejaba para siempre sus malas costumbres. El Indio, lacónico en sus discursos, decía:

-«En el desierto, queda una dirección, seguir adelante.»

-«Incluso, en el desierto, camino en la belleza.«

Nací en París, entre dos estaciones de tren (del Norte y del Este) . Pase una temporada de mi niñez entre musica, sol, playa y un poco de escuela en mi isla del Caribe (Gwada).
Después de una década, la vuelta a París no fue particularmente calurosa. Durante mis fugas escolares, llegue a Bélgica, a Estados Unidos (con el consentimiento agrio de mis padres por ser menor) y a Inglaterra.

Con colegas de la Sorbona, montábamos una asociación profesional de Relaciones Publicas con abono a la revista durante mas de diez años, tuvimos que viajar en toda Europa Occidental. Nuestra especialidad era la Comunicación Cultural (museos, galerías, happenings, cortos, conciertos y teatros).

Al mismo tiempo, en el poco tiempo libre que nos quedaba, durante cinco años, fuimos trovadores en una tropa de teatro experimental. Era una experiencia hermosa. Nuestro gran logro fue Aviñon, (unas horas) y un mes en un teatro parisino.

Cogí con otros colegas la dirección de un bar de cócteles de cerveza  en Gran Canaria pero no duro tanto.

Con la ayuda de dos botellas de excelente vino y un ramo de flores, tuvo el inmenso honor de conocer a mi mujer.

La felicidad nunca viene sola, nos acompañan ahora nuestras tres hijas, que ya hicieron sus viajes (Gran Canaria y Suiza).

Estamos de permanencia en Alicante.